Con más de mil 700 trabajadores en todo el país, la empresa THABA se dedica fundamentalmente a la producción y comercialización de artículos de talabartería, así como de materias primas derivadas del látex e incluye además el ensamblaje de piezas de bisutería.

La empresa no está exenta de la realidad económica del país, donde año tras año se ha hecho más difícil y complejo cumplir con los planes de producción y ventas, a partir de carencias palpables en temas de financiamiento.

El recrudecimiento de la política norteamericana hacia Cuba, trajo en el 2019 nuevos retos para el sistema empresarial cubano, quien tuvo que repensar estrategias y buscar nuevas alternativas dentro de la industria nacional.

El director adjunto de THABA, Segundo Linares Ramírez explicó que el plan económico de la empresa para el 2020 prevé un ligero crecimiento con la incorporación de materias primas de procedencia nacional y añadió que la empresa Tenería y Piel les suministra materias primas para la producción de medios de protección, aun cuando los niveles son ínfimos.

“A partir de la política proyectada por la empresa hasta el 2030, se vislumbra un despertar de los abastecimientos a la industria. Hoy contamos con empresas que nos producen las cajas, las cintas y las lonas”, acotó Linares Ramírez.
 

El aprovechamiento de los inventarios, la exploración de nuevos nichos de mercado, así como la inserción de la empresa en esquemas de financiamiento cerrados son algunas de las alternativas sobre las que hoy trabaja THABA.

La inserción de THABA en diferentes esquemas de financiamiento cerrado le ha permitido cumplir con sus compromisos productivos, a partir del financiamiento de las materias primas procedentes del mercado internacional.

Han logrado posesionar sus productos en aquellos organismos o instituciones que operen con esquemas de financiamiento cerrado. Actualmente mantiene contratos comerciales con Ministerio de Salud Pública, el Grupo Empresaria AZUCUBA, la empresa TABACUBA, así como la Empresa de Servicios a la Aviación Civil (SERVAC), la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) y la Institución Financiera no Bancaria FINATUR.

A su consideración, el director general de la entidad, Obdulio Rodríguez Hernández reconoce que el esquema con FINATUR es el que mejor funciona y considera que deberá seguir perfeccionándose cada vez más. En tal sentido, Efraín Yera Sánchez, director de mercadotecnia y comercialización, enfatizó que el esquema les ha permitido garantizar sus productos al mercado turístico.

“En el año 2019 recibimos alrededor de 270 mil dólares para financiar nuestras producciones, destinadas a satisfacer las demandas del turismo. Pudimos cumplir con lo pactado, en cuanto a cantidad, calidad y fecha de entrega. Para el 2020 está previsto un préstamo de alrededor de 450 mil dólares”, dijo Yera Sánchez.

THABA también desarrolla una estrategia comercial enfocada a la Zona Especial de Desarrollo Mariel. Actualmente se concilia con 20 empresas de las cuales cinco ya han firmado contrato.

Igualmente, se estudia la posibilidad de insertarse en el mercado de Centro América y el Caribe con uno de sus productos más demandados, los guantes domésticos. Según cálculos preliminares la empresa dispone de una capacidad inicial de un millón de ejemplares.

Otra de las tácticas de la empresa está dirigido a fortalecer los negocios conjuntos, el director técnico de THABA, José Millo Piñero subraya que se negocia con empresas extranjeras para penetrar de manera conjunta el mercado de las carteras, en especial las de mujer, al cual no se ha podido llegar como quisiera.

Diseños atractivos y duraderos distinguen las producciones de THABA que por más de 40 años han logrado permanecer dentro de la preferencia de sus clientes. En el 2020 se multiplican los retos, la empresa no solo deberá crecer en cifras, sino en ideas que la conduzcan hacia mayores niveles de eficiencia.